Las fachadas sándwich de hormigón son elementos portantes construidos de tres capas en la fábrica: la capa de revestimiento diseñada para el exterior, la capa de aislamiento necesario para la eficiencia energética en el medio y la capa portante en el interior.
El valor añadido de una fachada sándwich de hormigón respecto a los conceptos de fachada convencionales consiste en la capa portante interior integrada que complementa la obra bruta del edificio con una gran capacidad de carga. Esto permite realizar construcciones de paredes económicas y delgadas que, además, contribuyen a acelerar el proceso de construcción. También se integran el aislamiento térmico y la protección contra incendios conforme a la clase de resistencia al fuego F90. Además, la fachada sándwich de hormigón destaca por su excelente aislamiento acústico y aporta una extraordinaria protección mecánica contra factores externos.