Para el equipo de construcción de vías, esto significaba retos inesperados: aprox. 400 m de vía estaban sumergidos bajo el agua debido a un drenaje profundo defectuoso hasta el borde inferior del raíl. El desmantelamiento de las vías provocó además inundaciones desde el área de la presa. El equipo reaccionó inmediatamente y desarrolló una nueva estrategia y cálculo para su implementación. Se adquirieron bombas adicionales de gran tamaño para solucionar el problema. Gracias a dichas bombas, la sustitución del suelo y la colocación de vellón, así como una mezcla de grano 1 (subestructura impermeable al agua para cuerpos de vías à capa de protección de plataforma de vías) se logró una implementación rápida. A pesar de retrasos adicionales (por causas ajenas a nosotros), la obra se terminó seis horas antes del final del periodo de cierre.
“¡No existen los imposibles!“
Fiel a ese lema, Hering terminó el proyecto con éxito.